viernes, 27 de agosto de 2010

El violin Enamorado (un cuento escrito en dos noches)


Erase como todos los cuentos, un viaje onírico a través de las fantasías mágicas, en donde las gardenias arroparon las risas de las ninfas y los pétalos de las flores escondieron los rostros de las musas.

Llevando los susurros que a Cupido imploraban amor, más allá de las colinas de la eternidad, estridentes cuerdas dieron forma a un violín enamorado. A un corazón sempiterno en busca del amor ausente.
Tocando con sus finas cuerdas invisibles el lienzo del bosque en donde un alma solitaria hacia compañía a un bosque invisible, caminado como un ánima perdía cantaba sin sonido al amor ausente…
Cantando poemas a la noche, estilizando su alma sobre los caminos que no encontraban final al horizonte, sin esperanzas describía lo que su corazón miraba.

-- Mi corazón llora la caída de los pétalos. Mi alma canta a través de
un rio desconocido y mis ojos miran a una silueta en la orilla del rio.
Es tan lento el ir y venir en estas aguas de color ámbar por el ocaso
que me acompaña a ratos, que se hacen más y más eternos--

Las hojas caen de los arboles, bordando simples estelas sobre un lienzo
de madera.
Endulzando con un mágico canto el interior de su corazón vacío en la
noche, espera cantar en manos del destino un llamado de esperanza,
Rojo como el latir de un corazón enamorado, un día resonara tan alto
su llamado y a través de los Ríos y océanos flotara, dulce y
tranquilo atravesara los bosques y colinas acariciando los pétalos
de las flores.

--mis manos están inquietas por tocarte,
Mis mejillas desean sentirte tan cerca, para así poder acariciarnos
con el rose de mi piel y el dulce vibrar de tu canto--

La noche los cruzo en dos caminos que se entrelazaron haciéndose uno a
la distancia de donde el sol y la Luna se esconden, estrellas caen del
cielo como un polvo mágico que suavemente iluminaría las moches, bajo
un manto calmado y silencioso en el cual la noche arroparía el llamado
del corazón amado.

--Oh violín mágico, pósate en mis manos y cantémosle juntos al amor
una tonada dulce que exprese nuestra necesidad por encontrar al ser amado--

Un hada invisible porto del infinito al corazón del bosque un sonido que llamaría a las ninfas en sus escondites. Ahí, perfecto y puro, como el corazón de un ángel, se encontraba esperando ser tomado en sus manos y al alma poeta acompañar en sus versos, ser un dúo mágico para así complementarse y encontrar al ser iridiscente que a ellos llegue cruzando el profundo bosque invisible.



--Déjame tomarte dulce violín enamorado, que como yo has venido a este bosque invisible a buscar a tu amor, toquemos juntos el umbral que nos unirá con nuestro corazón amado.--


Tocando una melodía, el instrumento mágico respondió al poeta, permitiéndole unirse a el, y juntos cantarle al amor. El con su canto divino, con sus cuerdas invisibles hará resonar los poemas que del corazón perdido fluyan, en un manto de dulce amor, haciendo un llamado celestial al amor.
Posando con movimientos suaves y ligeros, al violín enamorado, como dos astros luminosos resplandecieron al bosque de arboles de cristal y pastizales translucidos.
Comenzando con pequeños arpegios que jugaban incontrolables de felicidad, con miedo el poeta busco el valor para alzar su inspiración al infinito y ahí en la distancia atraer al amor.
Un vals, un silencio y un sueño. Posando sus dedos sobre las cuerdas invisibles, el poeta comenzó a jugar con su compañero, encontrando la tonada que aria dueto con su inspiración comenzó a cantar a la noche.

--dulce amor mío.
Aquí en la noche tu corazón es mi inspiración, aquí en la distancia mi llamado aclama conocer tu nombre, mi corazón aquí postrado a tu espera, ruega conocer el aroma de tu piel y mi alma añora conocer el brillo de tu alma.

Viaja atravesando ríos y mares, recorre praderas y bosques, en donde a la distancia de las estrellas tu mirada inmaculada logre ver el movimiento de este vals hecho solo para ti.

Deja que tus oídos sean el camino que mi canto recorra para que el sonido de esta música celeste se pose en tu corazón y nunca mas quieras dejar de escuchar.

Detén la caída de las hojas, detén el apagar de las estrellas, ven dulce amor mío, ven y regálame un beso diciéndome con el cuanto me amas, cuanto añoraste encontrarme, aquí en la cercanía de este bosque invisible. —

Pronto un aroma dulce y tranquilo todo lo cubrió, deteniendo el canto del violín enamorado, deteniendo los canticos del poeta, ahí, en la oscuridad del bosque invisible, una silueta todo lo detuvo, ya las hojas dejaron de caer, ya las estrellas dejaron de apagarse.
Y un hermoso cuerpo celeste despendio de las alturas del cielo, como un ángel que de la nada apareció, para responder al canto de los enamorados.

Estática en el umbral de un árbol mágico, permanecía danzando una mística que solo en sus corazones se podía escuchar, un canto que el violín pronto recito como por arte de magia.
Levantando sus finas manos, el dulce ángel invito al poeta a unirse a ella y juntos bailar la tonada del violín enamorado., quedando muy cerca el uno del otro, bajo la protección de una luna resplandeciente, los dos bailaron al amor. A los compases del violín enamorado que feliz por encontrar a su amor recitaba mágicos canticos escritos en honor a los héroes míticos.




-- ¡ven!—

Dirigiendo a la distancia sus manos, deseando alcanzar al hermoso cuerpo presente en el bosque invisible.

--acércate a mi lado, y regálame un beso al compas del acorde del violín enamorado, ven a mi hermosa musa estelar y regala a mi frente un beso tuyo, ilumina a este bosque invisible con el brillo de tu piel, y has continuar en nuestro corazones el canto del violín enamorado—

Endulzando el bosque invisible el vals de uno se volvió un vals de dos enamorados y un violín, lentamente, como pausados por movimientos que parecían detenerse en la inmensidad del espacio. Los enamorados al fin juntos por el sonido mítico del violín, hicieron con un beso silencioso, un pacto de eterno amor.

Deteniéndose el canto del violín, los enamorados quedaron inmóviles mirando al cielo con una cálida sonrisa que lentamente se fue cristalizando al compas del preludio y el final del canto celestial de aquel violín mágico que del infinito llego a las manos del poeta enamorado, por que era el violín enamorado.



Fin…



Lunes 2 y martes 3 de agosto 2010



SENEKYZ

No hay comentarios.: